lunes, 26 de enero de 2015

ROY SULLIVAN, la curiosa historia del pararrayos humano



Roy Cleveland Sullivan nació en un pequeño pueblo de Virginia el 7 de febrero y aunque dedicó la gran parte de su vida a trabajar en el Parque Nacional de Shenandoah (Virginia), tomó lugar en la historia por ser el único hombre que ha sobrevivido al impacto de siete rayos.
En 1942 Sullivan se encontraba haciendo guardia en una torre de vigilancia contra incendios en el Parque Nacional en donde trabajaba. De pronto se desató una gran tormenta y la torre, que había sido construida recientemente, no tenía pararrayos. Un rayo alcanzó a Roy en la pierna derecha y le salió por el pie. Sufrió la perdida de la uña del dedo gordo y un agujero en su zapato.



Algo más de dos décadas después otro rayo le cayó encima mientras conducía su coche. Sullivan perdió el conocimiento y tuvo un accidente pero sus heridas fueron leves.Un año más tarde, en 1970, mientras se encontraba en la puerta de su casa un rayo le cayó y le quemó el hombro.

En 1972 Roy se encontraba en su puesto de guardabosques y otro rayo le impactó, esta vez el incidente fue más grave. Sullivan sufrió quemaduras en su cabello, lo que haría que siempre llevase una cantimplora llena de agua siempre encima, por si acaso.


Sullivan no se había recuperado del todo de las heridas del rayo anterior cuando sufrió otro impacto. Fue el 7 de agosto de 1973 y un rayo volvió a alcanzarle en la cabeza, tirándole del vehículo que conducía. Esta vez Sullivan estaba preparado y apagó el fuego de su cabellera con la cantimplora que antes hemos mencionado.

El 5 de junio de 1974 estaba paseando por campo abierto junto a su esposa cuando vio una nube peligrosa. Sullivan comenzó entonces a correr para alejar la amenaza de su mujer y buscar cobijo. El sexto rayo que alcanzó a Roy Sullivan impactó en uno de sus tobillos.


El séptimo y último rayo que le cayó encima a Sullivan lo hizo el 25 de junio de 1977 mientras estaba pescando peces en el lago del Parque Shenandoah. Este rayo le provocó quemaduras en el pecho y en el estómago y aunque fue hospitalizado tampoco encontró la muerte en este momento.ç
Por aquel entonces Roy Sullivan ya era conocido como el "Pararrayos humano" y su carácter fue degenerando hasta que se convirtió en una persona malhumorada y depresiva. Sus amigos comenzaron a temerle y poco a poco comenzaron a darle la espalda. Su mujer también acabó por abandonarlo.
Deprimido y solo Roy Sullivan se disparó en sus tripas con su arma reglamentaria el 28 de septiembre de 1983.


1 comentario:

  1. Incalificables hechos. ¡No me extraña! Pobre hombre; lo comprendo; todo un luchador; pero...
    ¿Quien soporta las consecuencias de un estigma con una diferencia de potencial de mil millones de voltios con respecto al suelo?

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