El proyecto MK ULTRA fue una investigación realizada por la CIA desde 1953 hasta el año 1975 la cual consistía en desarrollar distintos métodos que refinasen las torturas y los interrogatorios. Aunque no se sabe hasta que punto se llegó, debido a la destrucción de informes y pruebas, se puede decir que el programa fue todo un éxito. No solo se pudo investigar sin tabú alguno el efecto de numerosas drogas ,como el LSD, si no que también se llevaron a cabo numerosos experimentos de abusos tanto físicos como sexuales como el uso de "tratamientos" con electroshock que conseguían en la gran mayoría de los casos la desaparición de los recuerdos del sujeto en el que se probaban.
El programa fue detenido por el FBI en 1975 y años más tarde el presidente Bill Clinton pediría perdón a las victimas de tan atroz crimen pero muchas son las evidencias que han llevado a numerosas personas a creer que lo investigado por la CIA durante esos 22 años no es más que la punta del iceberg, que el proyecto MK ULTRA nunca se ha detenido y que dependiendo del territorio en donde te encuentres el proceso de programación mental cambia pero la simbología prevalece.
Autores como David Icke defienden que toda la cultura pop que es transmitida a través del cine, de la televisión, de la música no es más que un arma profundamente diseñada para programar y educar a las masas, atacando a su subconsciente, en los diferentes símbolos y comportamientos que desean los amos del Nuevo Orden Mundial, siendo lugar de referencia para desarrollar estas estrategias el instituto Tavistock.
Según Icke y diferentes expertos en la teoría de la conspiración los medios audiovisuales estarían repletos de contenido que no solo embrutece el intelecto e ingenio de las personas. Haciéndonos cada vez más conformistas, consumistas y estúpidos estos estímulos atacan a nuestra psique directa o indirectamente a base de mensajes esplícitos o mensajes subliminales y ocultos de corte sexual o segregativo. En definitva, un proceso de propaganda masiva del cual no puede escapar nadie.
En un principio podríamos pensar que todo sistema se ha escudado en el arte y la cultura para diseñar su propaganda y controlar y programar a las masas para utilizarlas en beneficio propio. Entonces ¿Por qué hablan entonces que distintas celebridades del mundo estarían siendo víctimas y complices de un proceso de programación mental? Según los conspiranoicos las pruebas son claras ya que cualquier persona mediática de nuestra sociedad realiza una serie de gestos y símbolos que son repetidos en cada videoclip, película o anuncio que vemos en nuestro día a día. Estos gestos van desde teñirse el pelo, taparse un solo ojo de la cara, participar en estafas de caridad o simplemente lucir los símbolos y estética de los amos del Nuevo Orden Mundial y de ser esto cierto ninguna estrella se saldría de la ecuación.
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